Ser psicólogo

EDUARDO CONTRERAS MERINO

Responder a esta pregunta no es fácil porque de entrada no se podría hablar de una sola forma de ejercer la psicología, si no que habría que decir que hay múltiples formas en las cuales se puede hacer su ejercicio, que van desde los psicólogos clínicos que trabajan más en el ámbito del consultorio o en instituciones donde se brindan servicios de atención personalizada.

Están también los que trabajan más en el ámbito social y que se dedican a analizar e intervenir en las formas de relacionarse entre los miembros de una sociedad o comunidad; así, existen muchas otras formas de ejercicio de la profesión.

Ahora, ¿Qué importancia puede tener esto para cualquier persona?, ¿por qué es importante la labor del psicólogo?... De entrada habría que decir que un psicólogo ante todo escucha, esto ya hace que su labor sea muy importante, ya que la mayoría de las personas no saben, ni quieren escuchar.

El psicólogo escucha y analiza lo que escucha, tratando de ser lo mas objetivo que pueda y sin buscar familiarizarse demasiado con el fenómeno o problemática que está escuchando.

Esto le permite actuar de una forma más clara con respecto al problema que se intenta comprender, y permite contribuir a encontrar, si no una solución en el sentido de resolución del problema, si la apertura de una serie de opciones de respuesta al problema estudiado o la problemática en particular de un sujeto determinado.

Esto hace que la función del psicólogo sea clave tanto a nivel personal como en el ámbito social, debido a que aporta otras formas de ver las cosas, de relacionarse con las personas, de Ser en el mundo.

Un punto importante a señalar aquí es cómo, a pesar de que hay muchas aportaciones positivas de los psicólogos, también hay una serie de aspectos muy negativos en su actuar y comportamiento con respecto a su profesión.

Uno de ellos es el constante aumento de psicólogos que, en vez de buscar aportar otras formas de concebir la realidad, buscan que la gente acepte y se comporte de acuerdo con una forma muy particular de ver el mundo, que está diseñada por un grupo de gente que determina lo que es bueno o malo, lo que es sano o enfermo.

Esta forma de concebir el ejercicio de la psicología está ganando más terreno cada día. Es una opción que no puede comprender ni aceptar la diferencia, que busca la uniformidad de las personas, convertirlas en autómatas, que dejen de pensar y sentir por ellos mismos.

Este tipo de ejercicio de la psicología esta muy ligado a la alianza entre ésta y la cultura empresarial, el monstruo que nació de esta unión fue cierto tipo de psicología clínica que bajo la bandera de una serie de términos técnicos como el de adaptación, establece estas “nuevas” formas de ser psicólogo.

No es posible abordar con más profundidad muchas de estas cuestiones, pero habría que decir que un psicólogo no es aquel que busca adaptar el orden de las cosas a su forma de pensar y concebir el mundo, sino aquel que pude ubicar que nuestro mundo está lleno de diferencias y que son dignas de ser escuchadas.

Así, es posible acercarse a conocer las distintas problemáticas ya sean sociales o individuales, y buscar ofrecer opciones y alternativas. Nunca se busca imponer una forma de ver la realidad sino, en la medida de lo posible, transformarla.